Manolo, machote, ya puedes relajarte. Sé quién eres, así que si vas a descubrirte el viernes creo que lo vas a hacer un poco tarde. Ya te dije que estaba muy cerquita, muy cerquita, tan cerca que hasta tu hijo se derrumbó el otro día y lo confesó todo (sí, sí, aunque parezca mentira, se vino abajo, no soportó la presión). Pero cuando digo que lo confesó todo es que lo "cantó" todo, todo y todo. Habla con él, que creo que tiene muchas cosas que contarte (ya le dije a él en una ocasión que en este blog no se podía fiar uno ni de su padre...¡uy!, Manolo, que te descubro sin querer).
¡¡¡¡JJJJJJAAAAAAAAAAJJJJJJAAAAAAAAAJJJJJAAAAAA!!!! Ya eres mío, Manolo, ya eres mío.
jueves, 16 de septiembre de 2010
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